La importancia de los Proyectos Piloto Inteligentes para una administración pública inteligente debe abordarse en la búsqueda de soluciones viables y significativas a problemas relevantes que afectan a las poblaciones, con la consiguiente reducción de costes y aumento de la calidad de vida de las personas.
La administración pública debe llevar a cabo Proyectos Piloto Inteligentes destinados a encontrar soluciones viables y significativas a problemas relacionados principalmente con la seguridad, la educación, la sanidad y las infraestructuras. La inacción gubernamental ante los grandes problemas que afectan a la población es un problema que aqueja a muchas sociedades. La falta de respuestas eficaces genera frustración, inseguridad y, en muchos casos, perpetúa la desigualdad social y los déficits públicos, un problema que se da en la mayoría de los países, incluidos los clasificados como del «primer mundo».
Los gobiernos deberían reducir la cantidad de fondos públicos gastados en sus acciones mediante buenas ideas probadas por Proyectos Piloto Inteligentes.
La administración pública desempeña un papel crucial en la búsqueda de soluciones innovadoras, viables, significativas y duraderas que promuevan el bienestar colectivo. Pero no sólo eso, las soluciones inteligentes pueden reducir costes y mantener e incluso aumentar la calidad de los servicios prestados. Los debates sobre las cuentas públicas deben considerar la reducción de los recursos públicos.
Se deben encontrar soluciones viables y significativas a través de la realización de Proyectos Piloto Inteligentes que puedan indicar la eficacia, eficiencia y efectividad de las acciones de los gobiernos, tanto federal como estatal, distrital y municipal, considerando soluciones inteligentes en el ámbito del emprendimiento público o emprendimiento estatal.

Proyectos piloto y su aplicación por la administración pública
Los Proyectos Piloto Inteligentes son una estrategia utilizada habitualmente para probar y evaluar la viabilidad de una idea, producto o servicio antes de implantarlo a gran escala. Estos proyectos suelen llevarse a cabo a menor escala, lo que permite a los responsables recopilar datos, información y opiniones meditadas para tomar decisiones inteligentes. Es una forma de minimizar los riesgos y maximizar las posibilidades de éxito, ya que permite identificar y corregir posibles fallos antes de invertir recursos importantes (GLOSARIO ZN7, 2024).
En resumen, los Proyectos Piloto sirven para: Validar la idea: Ver si realmente funciona y satisface las necesidades del público objetivo; Identificar problemas: Descubrir fallos o dificultades que puedan corregirse antes del lanzamiento oficial; Obtener opiniones de usuarios reales para mejorar el proyecto; Ajustar el proyecto: Modificar la idea en función de los resultados de las pruebas.Minimizar riesgos: Reducir las posibilidades de un gran fracaso por lanzar algo que nadie quiere o que no funciona como se esperaba; Optimizar recursos, etc.
Un Proyecto Piloto es un esfuerzo temporal emprendido para probar la viabilidad de una solución de sistema única presentada. Temporal significa que el proyecto tiene una fecha de cierre; único significa que el resultado final del proyecto es diferente de los resultados de otras soluciones de sistema sugeridas. En el contexto de la implantación de procesos y herramientas, significa experimentar con nuevos procesos y nuevas herramientas (CIN. UFPE, 2024).
Problemas que aquejan a la población del Distrito Federal
El Distrito Federal, a pesar de ser la capital de Brasil, se enfrenta a una serie de retos que repercuten negativamente en la calidad de vida de la población. Entre los principales problemas, podemos destacar Movilidad urbana con una capacidad sobrecargada; asistencia sanitaria pública que no llega a lo necesario; seguridad pública deficiente en algunas regiones; desigualdad social, deficiencias en infraestructuras y daños al medio ambiente.
El caso del paso de peatones en el Distrito Federal
Brasilia, la capital de Brasil, ostenta un título único: la «Ciudad del Respeto al Paso de Peatones». Este honor no se ganó por casualidad, sino mediante un proceso histórico de concienciación y compromiso mutuo entre peatones, conductores y autoridades. El 1 de abril de 1997 se instaló en la capital federal el primer paso de peatones con semáforos.
El gesto de estirar el brazo para señalar tu intención de cruzar la calle, conocido como la «señal de la vida», se ha convertido en un símbolo de la campaña y del ejercicio de la ciudadanía. Esta acción sencilla pero poderosa demuestra la conciencia de los peatones y su derecho a utilizar el paso de peatones con seguridad. Los resultados de invertir en una cultura de respeto a los pasos de peatones son innegables. Las estadísticas de Detran-DF muestran un descenso significativo del número de pasos de peatones mortales: 2020: 3 muertes; 2021: 6 muertes; 2022: 5 muertes; y 2023: 2 muertes (GEMINI, 2024).
En el gobierno del entonces gobernador Cristovan Buarque, organizó reuniones temáticas para proponer ideas relevantes y viables, pero de bajo coste, que pudieran mejorar la calidad de vida de los habitantes de Brasilia. Yo, Dálio Ribeiro de Mendonça Filho, como Responsable de Medio Ambiente (PPGG) del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno del Distrito Federal, en la reunión sobre transporte y tráfico de 1997, sugerí la puesta en marcha de un Proyecto Piloto Inteligente para verificar la posible eficacia, eficiencia y efectividad del cumplimiento de la ley sobre el respeto de los pasos de peatones, que en aquel momento ya era ley (Ley nº 9.503 de 23 de septiembre de 1997). La campaña de respeto de los pasos de peatones fue llevada a cabo en la capital en 1997 por la Dirección General de Tráfico (Detran-DF) y la Policía Militar.

El proyecto piloto se puso en marcha teniendo en cuenta mis sugerencias, y se implantó en Asa Norte, con publicidad previa en los medios de comunicación, la pintura de los pasos de peatones, la instalación de señales verticales y la presencia de un guardia del Detran y otro de la Policía Militar. El Proyecto Piloto de Paso de Peatones Inteligente funcionó en Asa Norte y se extendió a todo el Distrito Federal y después a otras regiones del país, con variaciones geográficas en cuanto al respeto a los peatones.
En Brasil, la legislación federal que regula los pasos de peatones es el Código Brasileño de Tráfico (CTB), establecido por la Ley nº 9.503 de 23 de septiembre de 1997. El CTB dedica un capítulo entero (Capítulo VII – Circulación Peatonal) a las normas y reglas que garantizan la seguridad de los peatones y su derecho al libre paso por las vías públicas (BRASIL. PLANALTO, 2024).