Un escenario que encontramos en capitales grandes, medianas y pequeñas de todo el país
La economía informal desempeña un papel fundamental en muchos países, especialmente en naciones en desarrollo como Brasil, donde una parte significativa de la población depende de actividades ajenas al sector formal para su subsistencia. La organización del trabajo informal, el desarrollo de una matriz económica inclusiva y la formación de jóvenes y emprendedores son pasos esenciales de una metodología institucional para promover el crecimiento económico estructural y sostenible, sin sacrificar la inclusión social en el país. El trabajo informal, caracterizado por la ausencia de regulación y protección social, es una realidad para millones de personas en todo el mundo. Organizar este sector implica crear estructuras que reconozcan e integren a estos trabajadores, dándoles acceso a derechos básicos como la salud, la seguridad social y unas condiciones de trabajo seguras. Las nuevas tecnologías, la Inteligencia Artificial y la última generación de internet, conocida como «5G», representan cada vez más las condiciones imperantes para la expansión del desempleo estructural. En Brasil, la tasa de informalidad, que es el porcentaje de trabajadores informales en relación con el total de la población ocupada, se situó en febrero de este año en el 38,7%, lo que representa 38,8 millones de personas (IBGE, 2024).
En consecuencia, es necesario desarrollar una matriz económica inclusiva que englobe a los trabajadores informales, mediante políticas públicas que promuevan la formación de medianos, pequeños y nanoempresarios, cada vez más concentrados en los sectores más jóvenes de nuestra población en edad de trabajar.
En este sentido, presentamos el Distrito Federal (DF), en primer lugar porque es fácil obtener datos de población y desarrollo regional y, en segundo lugar, porque entendemos que el protagonismo del DF no sólo se concentra como espacio geográfico para la toma de decisiones políticas a nivel nacional, sino también por su protagonismo en el eje centro-oeste, donde se produce un desarrollo económico y poblacional galopante.
En la zona que presentamos existe una economía robusta y diversificada, con un importante mercado de consumo que, según datos del Instituto de Investigación y Estadística del Distrito Federal (IPEDF), abarca a 2,9 millones de personas, con una renta media tres veces superior a la media nacional. Este potencial se complementa con la región metropolitana, que ya cuenta con más de 7.100 millones de habitantes, incluidos los municipios adyacentes de Goiás y Minas Gerais, con una importante contribución demográfica. Este escenario convierte al Distrito Federal en uno de los principales ejes de desarrollo del país, con un Producto Interior Bruto (PIB) cercano a los 300.000 millones de reales, IPEDF, 2020.
Contexto socioeconómico y participación del sector público
El sector público tiene una de las mayores participaciones en la economía del Distrito Federal, ya que representa más de la mitad de la economía local y emplea a casi el 25% de la población activa. En consecuencia, existe una dependencia casi natural del sector público. Sin embargo, lo que podemos considerar positivo tiene un contrapunto en el que la limitación al desarrollo de actividades económicas privadas acaba resintiéndose, lo que refleja una necesidad acuciante de políticas públicas que fomenten la inclusión y la equidad económica.
A pandemia do COVID-19 tem agravado as vulnerabilidades económicas, afetando desproporcionadamente as mulheres negras, sobretudo no grupo de idade de 24 a 39 anos, como evidenciou a Encuesta de Emprego e Desemprego de Abril de 2020. En vista de ello, cada día se hace más necesaria la promoción de políticas dirigidas a la igualdad de oportunidades, especialmente en apoyo al emprendimiento y a la generación de ingresos para los sectores vulnerables de la población, apuntando a nichos de resolución específicos, nano, pequeños y medianos emprendedores, con políticas de formación para el emprendimiento, así como para los emprendedores.
¡El titular de la licencia es un agente económico que inspira la economía local!
Los permisionarios, nano, pequeños y medianos empresarios que operan con autorización de las autoridades públicas, han surgido como agentes económicos esenciales para diversificar e impulsar la economía local. Estos empresarios suelen operar en mercados al aire libre y permanentes, en las calles y en grandes eventos, transportando pequeños volúmenes y alimentos, y necesitan apoyo específico para superar las barreras burocráticas y financieras que limitan su potencial de crecimiento y su seguridad social.
La Ley Complementaria nº 123/2006, conocida como Ley General de la Micro y Pequeña Empresa, y sus posteriores modificaciones por la Ley Complementaria nº 128/2008, introdujeron el Microempresario Individual (MEI), facilitando la formalización de los pequeños negocios y la inclusión en la seguridad social (BRASIL, 2006). En el Distrito Federal, la normativa se complementa con la Ley nº 5.547/2015 y el Decreto nº 38.554/2017, que organizan y regulan el funcionamiento de ferias y actividades económicas en espacios públicos (DISTRITO FEDERAL, 2015; 2017). Aunque existe un marco normativo, es necesario ponerlo en práctica, ya que la materia de vida y los agotadores horarios de trabajo hacen que la vida productiva sea a medio y corto plazo, lo que podría provocar un déficit de seguridad social sin precedentes en muy poco tiempo.
Retos y oportunidades para los titulares de permisos
Creemos que en estos nuevos tiempos y avances en la tecnología de datos, los retos a los que se enfrentan los permisionarios incluyen la necesidad de formación profesional, el acceso a la financiación, los tipos más bajos en los sistemas bancarios y el cumplimiento de los requisitos legales. Este texto pretende aportar nuevas perspectivas sobre las condiciones de los permisionarios y la situación de sus empresas, así como ayudar a señalar el camino de la cualificación de los nano, micro y pequeños empresarios en el acceso a las políticas públicas de microcrédito.
Metodología y aplicación
Tras analizar el comportamiento de este escenario económico y social, como profesionales formados en el ámbito social, no podemos sino contribuir a mitigar este problema prestando más atención y recopilando datos que incluyan la georreferenciación de las empresas y la recogida de información demográfica, socioeconómica y de comportamiento. Este enfoque permitirá un análisis exhaustivo de las condiciones y necesidades de los titulares de permisos, facilitando el desarrollo de políticas públicas más eficaces y específicas.
Por otro lado, podemos proponer la categorización de un posible enfoque es la distribución de la muestra por cuotas, reflejando la diversidad socioeconómica del Distrito Federal, dando prioridad a las regiones más afectadas por el desempleo. La metodología de recogida de datos que utiliza SOCIALSISTEMS para producir registros electrónicos y cuestionarios para políticas públicas garantiza la exactitud y fiabilidad de la información recogida.
Utilizar SOCIALSISTEMS como herramienta de apoyo
La integración de la herramienta SOCIALSISTEMS, una plataforma avanzada de gestión y análisis de datos sociales, permitirá el seguimiento en tiempo real de las actividades sobre el terreno, facilitando la coordinación entre los entrevistadores y el centro de datos. Además, la plataforma ofrecerá funcionalidades avanzadas de análisis, que permitirán identificar patrones y correlaciones que pueden informar decisiones políticas más precisas y específicas.
El uso de SOCIALSISTEMS también garantizará la seguridad e integridad de los datos recogidos, proporcionando un entorno seguro para su almacenamiento y análisis. La plataforma permitirá la visualización geoespacial de los datos, facilitando la identificación de las áreas más necesitadas de intervención y el seguimiento continuo de los resultados de las políticas aplicadas.
Conclusión
Los permisionarios desempeñan un papel crucial en la matriz económica del Distrito Federal, contribuyendo a la diversificación y resiliencia de la economía local. Fortalecer este segmento mediante políticas públicas específicas, formación profesional y un acceso más fácil a la financiación es esencial para promover la inclusión económica y la equidad social.
Por último, este artículo pretendía instigar la necesidad de debatir políticas públicas basadas en pruebas empíricas, considerando que los gestores necesitan una base de datos sólida y sin precedentes sobre los titulares de permisos para facilitar la toma de decisiones. La crisis provocada por la pandemia de COVID-19 pone de relieve la importancia de intervenciones eficaces y transformadoras que puedan mitigar los impactos económicos y sociales en las poblaciones más vulnerables.