Es importante analizar a tus antepasados
Los perros y los gatos pertenecen al mismo orden biológico, el Carnivora. Tienen similitudes y también diferencias en su forma de comer. Un punto en común es que estas dos especies se parecen mucho en la anatomía de sus aparatos digestivos. Por ejemplo, cuando analizamos sus bocas podemos identificar dientes caninos bien desarrollados, utilizados para apresar presas, y fuertes molares adecuados para desgarrar carne y romper huesos. A diferencia de nosotros, los humanos, no tienen ciertas enzimas salivares ni intestinos adaptados a la utilización de hidratos de carbono. Sin embargo, sus estómagos tienen un pH ácido ideal para descomponer las proteínas presentes en la carne. A pesar de sus similitudes, las diferencias en sus hábitos alimentarios son notables. Por eso es importante analizar a sus antepasados. O, en la actualidad, a los individuos que han vuelto a un estado devastado (ferales). De este modo, se podrá observar que el menú y las estrategias para adquirir alimentos son diferentes entre los gatos y los perros asilvestrados. Conviene recordar que los alimentos industrializados para perros y gatos que ofrecemos, a pesar de ser equilibrados, tienen una cantidad mucho mayor de hidratos de carbono que de proteínas.
Estrategias de alimentación canina
Los perros asilvestrados buscan (exploran) el entorno en busca de cualquier tipo de alimento, dando prioridad a las proteínas (carne) cuando las encuentran. De este modo, podemos dividir el proceso en tres etapas básicas: búsqueda; identificación; selección. En este contexto, el sentido del olfato (10 veces más potente que el nuestro) es el principal aliado de los perros en la búsqueda de comida. En otras palabras, los perros son carnívoros por definición y omnívoros por conveniencia, lo que los convierte en carnívoros no estrictos y en la especie mejor adaptada a la convivencia con los humanos. Pero no te equivoques, los perros, como los gatos, son excelentes cazadores y, a diferencia de los gatos, pueden cazar en grupo. Sin embargo, en los entornos urbanos, los perros callejeros suelen hurgar en la basura y rodear los restaurantes en busca de sobras humanas.
Estrategias de alimentación felina
Los gatos asilvestrados cazan presas pequeñas y medianas. No suelen compartir las comidas, salvo con sus crías, en el caso de las madres. A diferencia de los perros, los gatos se consideran carnívoros estrictos. Es decir, no acostumbran a comer alimentos ricos en hidratos de carbono, a excepción de los gatos de exterior, que pueden aprovechar restos de comida humana con diversos ingredientes en su composición. Algunos investigadores consideran que los gatos son una especie semidomesticada. Como tales, la mayoría de los gatos domésticos son excelentes predadores. Cuando un gato tiene la oportunidad de cazar en el entorno, muchos propietarios se sorprenden y se encuentran con presas como pájaros, roedores y lagartos.
Bienestar de las mascotas
El bienestar animal puede considerarse un estado físico, psicológico y natural ligado a la calidad de vida de un individuo. Es una adaptación al entorno en el que se vive. Por tanto, cuando confiamos en los animales, tenemos la obligación de proporcionarles todos los elementos necesarios para que puedan comportarse de la forma que se espera de su especie. Como guardianes y cuidadores, nuestras obligaciones se guían por las necesidades de los animales que cuidamos. En términos generales, éstas son: proporcionar una dieta equilibrada y suficiente, agua potable fresca. Recibir las vacunas esenciales contra los agentes infecciosos. Suministro de refugio con un lugar de descanso que permita amplios movimientos y acceso a un aseo limpio y adecuado. Confort térmico con acceso a la luz solar y posibilidad de resguardarse de la lluvia. Debemos promover un manejo que no provoque ansiedad, miedo ni dolor y que permita un juego armonioso inter e intraespecífico y la interacción social. Una forma de estimular a nuestras mascotas es el enriquecimiento alimentario. A los perros les gusta olfatear, por lo que una excelente estrategia de enriquecimiento ambiental consiste en esconder comida en distintos lugares para motivarlos a la hora de comer. Los gatos, por su parte, son cazadores natos, así que estimularlos con juegos de caza lanzándoles comida para que la cojan en el aire o corran tras ella como si fuera una presa, sin duda les hará sentirse satisfechos con el resultado final de todos sus esfuerzos.
La influencia de la alimentación en el comportamiento
Para que las mascotas mantengan las funciones básicas y el funcionamiento de su organismo, así como una buena condición física, es necesario que dispongan diariamente de una dieta equilibrada y de la posibilidad de hacer ejercicio con paseos, carreras y juegos. Además del ejercicio físico, una dieta sana desempeña un papel fundamental en la consecución del bienestar físico y mental. Por otra parte, la falta de nutrientes puede causar depresión, ansiedad y llevar al organismo al colapso con síntomas característicos como cansancio, fatiga muscular, letargo y apatía, presentes en diversos trastornos del comportamiento.
La comida cura
Los alimentos desempeñan una función medicinal cuando los alimentos o los elementos que contienen aportan beneficios para la prevención o el tratamiento de enfermedades. Cuando los alimentos tienen propiedades terapéuticas, se denominan nutracéuticos. Los nutracéuticos se utilizan para complementar la dieta con ingredientes biológicamente activos obtenidos de los alimentos. Pueden ayudar a las mascotas con trastornos del comportamiento porque actúan sobre los neurotransmisores y los receptores neurológicos. Estas acciones bloquean la recaptación o liberación de hormonas como la serotonina y la noradrenalina, provocando efectos antidepresivos y ansiolíticos en el organismo. Estas hormonas contribuyen al funcionamiento y equilibrio de varias regiones cerebrales implicadas en distintas respuestas conductuales. Entre ellas están la memoria, el estado de ánimo, las emociones y los sentimientos. Algunos ejemplos de nutracéuticos son: L-carnitina, betaglucanos, triglicéridos, ácidos grasos (omega-3), betacaroteno, antioxidantes y probióticos (microorganismos vivos). Están presentes como puente en la comunicación entre el cerebro y el intestino. Dado que la microbiota intestinal alberga y absorbe estos compuestos presentes en la dieta enriquecida, actúan regulando el sistema nervioso central. Esta vía es fundamental para el buen funcionamiento del organismo y para el tratamiento de los trastornos del comportamiento cuando existe un desequilibrio.
